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El otoño ya está aquí, pese a que el clima quiera hacernos pensar lo contrario. Y con él llega ese momento que a todas nos da tantísima pereza: el cambio de armario.
Pues bien, quizás hoy sea un buen día para leer algunas recomendaciones que te harán ganar espacio y, además, tener la sensación de tenerlo todo más bonito y ordenado. Porque sabemos que aunque repitas constantemente la frase “no tengo nada que ponerme”, lo tienes todo hasta arriba. Así que coge papel y lápiz que allá vamos:
1. Saca toda la ropa de invierno del altillo y plantéate qué prendas hace años que no utilizas. Sabemos que siempre se quedan unas cuantas “por si acaso”. Esas guárdalas y date una última temporada por si vuelves a ponértelas. El resto, puedes regalarlas o donarlas.
2. Cuando hayas dejado fuera todo lo de verano y antes de meter lo de otoño, haz una limpieza a fondo de todo el interior del armario.
3. Aprovecha y mete saquitos de flores secas en las baldas y cajones. ¡Tu ropa olerá genial todo el año!
4. Este momento es excelente para llevar a la tintorería todo lo necesario y arreglar esos botones que faltan.
5. Puede parecer una tontería, pero comprar perchas que sean todas del mismo color y tamaño te dará mayor sensación de orden.
6. Antes de comenzar a guardarlo todo, piensa bien dónde vas a poner cada cosa. Lo mejor es que lo que más abulta vaya en un armario aparte. Si no cuentas con este espacio siempre hay soluciones como roperos de tela.
Armario de tela de Ikea
7. Nuestra recomendación es colocar las camisas, pantalones y chaquetas en perchas. Las camisetas, sudaderas y jerseys pueden ir doblados en vertical para disponer de más hueco.
8. Los zapatos… Nunca tenemos suficientes, ¿verdad? Normalmente no hacemos cambio de armario para ellos, pero sí que puedes moverlos y dejar en las baldas más accesibles los que vayas a usar con mayor frecuencia los meses de frío. Igualmente, si no dispones de espacio para ellos hay opciones tan ideales como estas.
Zapatero Ikea
9. Los bolsos es preferible que no los amontones para evitar que se estropeen. Elige un estante y colócalos de pie, uno al lado del otro. Los que solo utilices de forma ocasional mejor que los guardes dentro de una bolsa de tela.
10. Ordena la ropa por estilo o color. Esto te facilitará la vida cada mañana al encontrar de forma rápida lo que andabas buscando.
Esperamos que estos consejos te den tan buenos resultados como a nosotras :)
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